Disegno chapuza.
¿Diseñas o trabajas? Se dice actualmente, cansados
de tanto producto fashion. Pero en mi
caso iba abocado al diseño, puesto que mi interés en estudiar Bellas Artes iba
parejo a mi familiaridad con la Escuela de Artes y Oficios (o Artes Aplicadas)
a la que mi padre había dedicado su vida, y desde 1963 los estudios de la
Escuela eran en un noventa por ciento especialidades de diseño. Así era
inevitable que me interesara también por el “diseño del producto”, lo que por
otro lado sonaba bien, sólo que con ese toque artesanal o torpe si se quiere que da el carácter de lo imperfecto.
Un estilo de diseño fashion –rústico, que sería el equivalente del estilo bricolaje chapuza, pero en diseño. Pura
coherencia.
Se empieza por pequeños artefactos útiles, como una
sillita para mi hija Alicia. Para ello la madera es ideal, bueno, para casi
todo.
O un huevero para la cocina, en el que además de
huevos puede asentar sus posaderas el mismísimo Humpty Dumpty del cuento de
Alicia, no es casual que mi hija se llame también así.
La aparición del personaje del cuento dio lugar a
toda una serie de huevos en las circunstancias más variadas.
Si se necesitan muebles, bien está aceptar la
sugerencia del amigo Rietveld, lo más parecido a una escultura para sentarse
que conocía cuando realicé una copia artesanal. De nuevo madera y una capa de
esmalte.
U
otra opción, de diseño propio, pero igualmente estructurada y algo más
funcional. Con suficiente versatilidad como para soportar el desorden del
cuarto de los locos bajitos y prestarles un poco de orden. ¿Recordáis?
Orden y caos.
O este cabecero grabado a fuego con motivo un tanto esotérico. No os
preocupéis, no soy judeo –masónico (aunque
no me disgustaría).
O tan funcional y descarnada como esta lamparita dicroica. Pura esencia y libre de todo artificio. ( todo
lo contrario de lo fashion).
O tan historiado como este
caballete, que diseñé y realizó mi hermano Fali, en su etapa de ebanista,
después de la de electricista, antes de la de cerrajero, o la de técnico en
calentadores, antes aún de la de técnico en video cajeros, y mucho antes de la
de… En fin, en una de sus polifacéticas etapas.
Ha servido de soporte a un buen montón de cuadros,
cumpliendo su función de maravilla, gracias a su solidez y capacidad de
balamceo.
Una tabla de surfing playa para Pablo, ¿recordáis? mi hijo el mayorcillo.
…Un banco para la terraza acompañado por unos
maceteros de trencadis, un tanto demasiado
gaudianos.
¡Más bricolaje!
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